Airbnb es una de las plataformas más utilizadas por lo usuarios para buscar y reservar sus estancias en otros lugares ya sea por razones laborales o en periodos vacacionales y de disfrute.
En el caso de los alojamientos rurales, son muchos los que han decidido dar el paso y entrar en Airbnb para ofrecer sus alojamientos a través de este servicio.
En este post vamos a tratar de explicaros las ventajas e inconvenientes de utilizar este tipo de plataformas a la hora de conseguir huéspedes en tus alojamientos y por qué consideramos que Airbnb no es la mejor opción para casas rurales.
El coloso Airbnb. Principales ventajas e inconvenientes
En primer lugar, es importante señalar que no consideramos que Airbnb sea un enemigo para los alojamientos rurales, su competencia directa son las plataformas de intermediación online. Es más, como vamos a explicaros en este post, lo deberemos usar como aliado para mejorar nuestras ventas. Pero vaya por delante que creemos que Airbnb no es la mejor opción para casas rurales.
Principales ventajas:
Mayor visibilidad
El crecimiento de Airbnb ha sido exponencial en los últimos años, por lo que es cierto que ofrece al alojamiento beneficiarse de una mayor visibilidad.
No requiere contrato:
No existen negociaciones y por tanto, todos los establecimientos juegan en la misma liga.
Comisión baja:
La comisión que ofrece Airbnb a los alojamientos hoteleros es más baja que las que ofrecen las OTAs (Agencias de Viaje Online), lo que permite al hotelero jugar con sus precios netos y tener mayor margen de maniobra.
Principales inconvenientes:
Tarifa de servicio:
Airbnb cobra a los inquilinos entre un 5% y un 15% de comisión, poco justificable, pues un servicio de atención 24/7 para hoteles es casi un requisito mínimo y no un valor diferencial como parecen mostrarnos. Este incremento en el precio puede justificar la decisión final del cliente por reservar nuestro alojamiento.
Cancelaciones:
Sobre esto hay que tener en cuenta 2 puntos:
- Si vuestro alojamiento establece una política de cancelación estricta, la plataforma te penalizará para no aparecer en primeras búsquedas.
- Si el alojamiento cancela la reserva, Airbnb te cobrará una tasa de cancelación y te penalizará igualmente.
No existe el pago directo en hotel
Todo se gestiona a través de la plataforma, incluso la reserva.
La necesidad de darse a conocer
“Vender online es complicado. Necesitas darte a conocer para conseguir reservas”
Seguramente os sintáis identificados con esta frase y tenéis toda la razón.
Es cierto que plataformas como Airbnb u OTAs como Booking nos permiten captar nuevos clientes con mayor alcance que si lo hiciéramos mediante venta directa. Atraer nuevos clientes es quizás la parte más difícil y costosa para un hotel o casa rural.
Sin embargo, cuando se trata de clientes ya conocidos o personas que realizan una búsqueda orgánica desde Google, vuestras posibilidades de ser más efectivos y generar mayores ingresos se incrementan notablemente si disponemos de un canal directo. Por ejemplo, una página web propia de vuestra casa rural.
Es importante ir rebajando la dependencia por este tipo de plataformas y dar pasos progresivamente hacia la venta directa desde vuestro propio canal online.
Para romper la dependencia, potencia la venta directa
Ante estos inconvenientes que se nos presentan, es una gran oportunidad decidirse por querer potenciar de nuevo vuestra venta directa e incluso llegar a los resultados y cuotas que se obtuvieron en el pasado. Otros simplemente buscaréis hacer crecer vuestro tráfico web pues actualmente es residual.
En cualquier de los casos, tenemos un conflicto garantizado. La razón no es otra que la web de vuestro alojamiento rural y la de AirBnb compiten por los mismos clientes: si quieres conseguir nuevas reservas a tu web, tenéis que tratar de “robarlas” (o mejor dicho “recuperarlas”) de otros canales, entre los que, presumiblemente, se encuentre Airbnb.
Esto es lo que se conoce como teoría de juegos de suma cero. Es decir, la situación en la que la ganancia o pérdida de un participante (vosotros) se equilibra con exactitud con las pérdidas o ganancias de los otros participantes (Airbnb).
Por otro lado, no habrá ningún cliente que, antes de realizar la reserva en tu hotel rural, no revise otras webs de viajes y comparadores para confirmar tus precios y ver si lo que tú le ofreces es la mejor opción.
Por ello, es importante estar en este tipo de webs de alojamiento online, con vistas a tener cada vez menos presencia, de tal forma que nos beneficiemos de vender a través de estas plataformas, pero sin depender de ellas.
Conclusión
Es cierto que recurrir a aplicaciones como AirBnb o Booking parece el único camino a tomar por algunos hoteleros, pues sin su apoyo y logística se sienten a la deriva y fuera del mercado turístico.
Realmente los alojamientos rurales, suelen salir poco beneficiados con este modelo de negocios, y tienen alternativas para crecer. Para ello es esencial un marketing especializado y una gestión online y offline exitosa.
Definitivamente Airbnb no es la mejor opción para casas rurales.