Hemos escuchado hablar mucho últimamente de turismo ecológico o, mejor dicho, de ecoturismo.
Una palabra que está en boca de todos, debido a que cada vez estamos más concienciados con el cuidado de nuestro planeta. Esto ha creado un nuevo perfil de viajeros que está ganando importancia a pasos agigantados: los ecoturistas.
¿Pero de qué se trata?
Una definición más detallada de este concepto, relativamente nuevo, sería la siguiente:
Es una modalidad turística responsable, enfocada en el equilibrio del medioambiente, que consiste en viajar o visitar áreas naturales disfrutando de ellas sin modificar el equilibrio medioambiental y evitando los daños a la naturaleza.
La palabra clave es “responsable”. El ecoturismo es un turismo alternativo responsable, buscando un modelo de desarrollo sostenible de su entorno, minimizando el impacto ambiental y solidario, favoreciendo el beneficio socioeconómico de la población local.
¿Porque elegir el ecoturismo?
Ya lo hemos dicho, es un turismo que sigue unas valores. Es ambientalmente responsable (en el manejo de las atracciones turísticas), respetuoso de su entorno y solidario de las comunidades locales, más auténtico e interactivo. Nos permite aprender más sobre nosotros y la naturaleza que nos rodea.
Economicamente accesible
Dada la situación actual de mucho de nosotros, una ventaja del ecoturismo es que es barato, lo que contribuye a su crecimiento a lo largo de los años. Es una apuesta segura para viajar y disfrutar de tus vacaciones sin acabar con la cartera vacía.
Nos permite descubrir las maravillas naturales de nuestro medio rural y disfrutar de rincones de gran belleza y valor incalculable.
Aquí algunas actividades a realizar en familia:
– La observación de:
- Fenómenos y atracciones naturales (desde erupciones volcánicas, geysers, cascadas, auroras boreales..y tantas otras!)
- Geológica, de fósiles, o bien de flora: una actividad también educativa.
- La observación de fauna en parques naturales (en España contamos con osos, el lince ibérico, lobos, aves rapaces, entre otros.
– La fotografía para profesionales o aficionados
– El senderismo (en un parque nacional o cualquier lugar natural)
Un turismo ético
Tenemos la responsabilidad de proteger nuestros recursos y buscar la armonía entre Hombres y Naturaleza. El ecoturismo va más allá del simple turismo. El viajero ha de promover la preservación de su entorno y apoyar a las poblaciones locales que viven de ello.
En ese sentido buscamos un desarrollo sostenible, para que crecimiento y desarrollo económico sean compatibles con la conservación medioambiental.
Practicar un turismo rural más sostenible
Respetuoso con su entorno natural y la biodiversidad.
Pernoctar en alojamientos turísticos eco-friendly. Nos aseguramos del uso de materiales orgánicos y reciclados en su construction, productos biodegradables.
Respetuoso de la cultura local, generando actividad (empleados locales, repercusiones benéficas en los comercios cercanos..), guardando la esencia tradicional del medio rural y su patrimonio social.
¿Porque no visitar fiestas tradicionales y descubrir costumbres diferentes?
¿ Un alojamiento turistico sostenible?
Medir la sostenibilidad de un alojamiento turístico, es fácil. Os voy a dar un ejemplo basado en mi propia experiencia de trabajadora en un Bed and Breakfast sostenible.
El establecimiento fue construido en un lugar 100% natural: a la derecha, una playa donde no se ve fin, a la izquierda, un bosque. Los materiales de madera (de la zona) tratados y pintados con productos ecológicos y respetuosos del medioambiente.
Un autobús llega con cierta frecuencia a 10 minutos caminando.
Teniendo la ventaja de estar en una zona soleada, la electricidad depende de paneles solares, dispersados en la propiedad, dando todo el confort moderno de una ducha con agua caliente. Por supuesto las bombillas son de bajo consumo, aunque no hagan mucha falta durante el día. Muchos lugareños usan también eolias.
Los productos de limpieza y el shampoo ofrecido a los huéspedes son “grey water” es decir, sin impacto para la naturaleza, pudiendo reutilizar el agua de las duchas para regar las plantas aromáticas que rodean la cocina.
Disponemos de basura para reciclar a disposición. Y por si esto fuera poco, ¡contamos con un compostador para los desechos orgánicos!
Bebemos agua filtrada de lluvia que recolectamos en grandes tanques, y además, tenemos suerte de tener una fuente subterránea de agua que podemos explotar, manteniendo un consumo responsable y reduciendo su uso en periodos de sequía.
La comida ofrecida es, en la medida de lo posible, orgánica y local. Contamos con unas cuantas gallinas que nos dan huevos. Toda la fruta, verdura y miel provienen de nuestros vecinos, que viven de sus cultivos.
Una vez al año se puede observar una migración grande de aves que vienen a descansar cerca y nidificar antes de continuar su vuelo.
¿Se pierde el confort moderno? Para nada. ¿Se disfruta más y se puede descansar en condiciones? Por supuesto.
Un turismo que tiene futuro
El ecoturismo es ideal para descansar y bajar los niveles de estrés que provoca la vida urbana, alejándose de la contaminación que crea la misma.
Pero sería erróneo reducir el ecoturismo a cualquier actividad turística relacionada con la naturaleza, ya que, estas pueden causar daños importantes al ecosistema, como cualquier turismo de masa.
La consciencia de la importancia del cuidado del medioambiente ha creado un viajero más cuidadoso con el mismo. Un viajero que evita el turismo tradicional, que pueda deteriorar ciertas zonas naturales y, con sus acciones, logra cuidar parte de nuestro ecosistema.
Los turistas toman cada vez más consciencia del impacto de su viaje y contribuyen a un desarrollo sostenible creciente. El turismo ecológico no tiene nada que envidiar al turismo tradicional y tiene un futuro brillante por delante.
Chrystal Gremy, profesional del turismo, viajera, multilingüe y diplomada en psicología por la universidad de Niza.